El panhispanismo, en Nueva Revista

¿Se producirá fatalmente la disolución del español? ¿Consiste la tarea de la Asociación de Academias de la Lengua Española en retrasar al máximo la llegada de ese momento, trabajando activamente en la preservación de la unidad? Respuestas: en el último número impreso de Nueva Revista.

«Panhispania», de David Fernández Vítores

«Panhispania» dibuja un estado de la cuestión del español centrado en aspectos políticos, económicos, culturales, demográficos... y datos, muchos datos. Lo firma David Fernández Vítores, responsable del informe «El español, una lengua viva», con el que establece un contrapunto muy interesante.

«Hablamos la misma lengua», de Santiago Muñoz Machado

La historia política, jurídica y social del largo proceso que llevó a que el castellano se convirtiera en el idioma general de América tiene mucho de épica y de romanticismo, al decir de Santiago Muñoz Machado, que cuenta esa historia «con la pasión que da el conocimiento».

El español entre el bilingüismo y la diglosia

Hace más de una década, el entonces editor de «Nueva Revista» publicaba una «Tercera de ABC» en que daba cuenta de las conclusiones del Congreso de la Fundación «Obra Pía de los Pizarro» sobre El Español y sus Culturas, celebrado en Trujillo (Cáceres) en los días del 16 a 19 de mayo de 2011. Lo que eran simplemente unas conclusiones científicas se han convertido en una lacerante llamada a la sensatez de carácter universal.

El español, una lengua americana

El catedrático Manuel Casado Velarde analiza el futuro del español a partir de los datos del Anuario del Instituto Cervantes y ofrece algunas claves del panhispanismo lingüístico en la actualidad: pluricentrismo, unidad ortográfica y adopción de voces americanas.

Panhispanismo: un congreso de 1963

«El panhispanismo no es cosa de ahora, ni siquiera de hace poco, y estimo que importa recordarlo». Así lo hace Pedro Álvarez de Miranda en este texto.

El gran injerto: la lengua española

El español es ahora la lengua de España y de la mayor parte de América, y ha conservado su unidad, indica el filósofo y académico. La prueba es que uno lee textos de autores de varios países y no sabe de cuál, si no se especifica expresamente.

El panhispanismo después del panhispanismo

El panhispanismo lingüístico, como explica aquí el académico Francisco Javier Pérez, no es resultado de un acuerdo de gabinete, sino la simple y llana valoración de los caracteres históricos de una lengua que nace diversa.

«El español vive un momento de expansión y dominio»

Francisco Javier Pérez, secretario general de la Asociación de Academias de la Lengua Española, reflexiona sobre la íntima relación entre cultura y lengua, y también sobre la expansión y dominio del español en la actualidad.

«Lo que América le debe a España», de Marcelo Gullo

Frente a la leyenda negra española, una oleada de libros argumenta en sentido contrario. El de Marcelo Gullo es uno de los más vehementes y lo es desde el mismo título: «Lo que América le debe a España».
Sede de la Academia Colombiana de la Lengua

Colombia y su contribución a la lengua común

Colombia, desde Rufino José Cuervo y su magno «Diccionario de construcción y régimen de la lengua castellana», hasta hoy, contribuye de forma destacada al fomento del estudio científico del español, que no es solo «una tarea local o regional».
Quito, a mediados del XIX. Foto: ©Wikimedia Commons

La lengua de Ecuador: diminutivos y cortesía

La directora de la Academia Ecuatoriana de la Lengua ha sido investida doctora «honoris causa» por UNIR. Subrayó, en su discurso de recepción, que en Ecuador el uso del diminutivo muestra a veces «timidez de ánimo del hablante».

Conquista espiritual y lenguas indígenas

UNIR ha investido a Gonzalo Celorio Blasco doctor «honoris causa». Celorio Blasco, director de la Academia Mexicana de la Lengua, destacó en su discurso que la conquista espiritual de América Latina se produce sobre todo con lenguas indígenas.

De imperio a emporio. La unidad de la lengua española

La lengua, más que de los expertos, es patrimonio de los hablantes y no de las instituciones. Por ello, quienes están más interesados en la unidad de la lengua no son los organismos, sino quienes la utilizan como medio indispensable de su trabajo.