Javier Gomá Lanzón
III Premio Antonio Fontán de Periodismo Político
Idola tribus, la destrucción del humanismo
Lo público, más allá de lo estatal
La majestad del símbolo
Del apocalipsis hasta la coronilla
La opción fundamental de España
La idea más influyente del siglo
Este artículo trata de definir la idea más importante del siglo XX, que preside todas las direcciones del pensamiento contemporáneo. Esta idea está relacionada con las evidencias históricas y sociales que proporciona el lenguaje corriente o natural. Este lenguaje no es la verdad sino que permite pensar la verdad, un nuevo concepto de verdad que contrasta con la verdad científica y exacta, intemporal y especializada del modelo positivista decimonónico. Ahora bien, pese a toda la originalidad de la idea más influyente del siglo, lo cierto es que prolonga una tradición secular de centralidad del lenguaje en la metafísica occidental. Y el lenguaje es ideología, es dominación. Por ello el autor propone un nuevo paradigma, insinuado al final del artículo, donde el lenguaje y su modo de pensar sean sustituidos por una racionalidad basada en la imagen y la imitación.
Una ley de fundaciones que no las extinga
Hace solo unos días, el 19 de noviembre, con motivo de la presentación de una nueva Agencia de Patrocinio y Mecenazgo, Jordi Pujol, Presidente de la Generalidad de Cataluña, manifestó que su partido, Convergencia y Unión, "explora la posibilidad de revisión de la Ley de Mecenazgo". Opina el mencionado que el "marco legal vigente", que juzga pobre, trae causa del concepto que el PSOE tenía del mecenazgo. "El PSOE -afirmó- veía el mecenazgo como una manera de evadir impuestos".
La salvación por la belleza
Hans Urs von Balthasar
Teodramática 4. La acción
Ediciones Encuentro
Madrid, 1995,484 págs.
El sabor y el saber de la experiencia de la vida
Ortega pensó que lo originario de la enigmática realidad "vida"
lo experimentamos los hombres como un mero sabor, e
imaginó a éste miriádico y plural. Pero acaso se trate de una
experiencia que -sin ser ciencia positiva, ni intuición o comprensión
alguna- tampoco sea un sabor, sino un verdadero saber
humano.