Alberto M. Arruti

42 Publicaciones 0 COMENTARIOS
Alberto Miguel Arruti (1932-2011) licenciado en Ciencias Físicas, periodista y escritor; trabajó muchos años en RTVE, donde llegó a ser Director de los Servicios Informativos de TVE y RNE. También fue miembro de la Junta Directiva de la Asociación Española de Comunicación Científica. Impartió docencia en la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid, así como en las Universidades Europea de Madrid, CEU San Pablo y Universidad Internacional de Andalucía.

El ozono y la vida

El ozono es un estado alotrópico del oxígeno. Por el término alotropía se entiende la propiedad, que presentan ciertos elementos, de poder existir en más de una forma, debido a diferentes disposiciones de los átomos o de las moléculas. Así, una molécula de oxígeno contiene dos átomos, mientras que una molécula de ozono contiene tres. El ozono es un gas azul claro, que resulta tóxico para la vida humana, incluso en pequeñas concentraciones. Pero, en la estratosfera, produce una acción que resulta esencial para la vida en la Tierra. Pues protege la superficie de nuestro planeta de la radiación ultravioleta producida por el Sol, que podría de otra forma barrer la vida de la mayor pane de nuestro mundo. El agujero en el cielo fue observado por primera vez por un equipo de investigadores británicos que trabajaban en la Antártida en 1982. Más tarde, se observó que no se trataba de un fenómeno aislado, lo que se vio por la disminución del ozono, en los últimos años, sobre el Hemisferio Sur. O sea que la integridad de la capa de ozono se encuentra seriamente amenazada por determinados productos (de forma particular, por los que contienen cloro) cuya presencia en la alta atmósfera ha aumentado , en los últimos tiempos, de forma espectacular. Y es, a través del agujero del cielo, donde pasa, con mayor facilidad la radiación ultravioleta. En la primera parte de este libro, escrito de forma clara y con una abundantísima documentación, su autor John Gribbin , nos describe los hechos, para pasar , posteriormente. a exponer las posibles vías para remediar esta situación. Nueva s medidas A ello dedica el último capítulo , que lleva el título de: estrategias para la acción. En este sentido , resulta particularmente importante la conferencia de Montreal , que di o lugar a u n tratado internacional dirigid o a proteger el medo ambiente. Se garantizan , y aquí puede residir lo más importante de esta reunión, revisiones periódicas a la luz de la nueva evidencia científica. De todos modos , continúan siendo vertido s e n el air e productos que atacan al ozono. Aunque sólo consideremos el agujero de la Antártida, los biólogos se encuentra n preocupados por la amenaza, que pesa sobre el fitoplancton. que supone el que cada ve z más radiación ultravioleta alcance la superficie del océano e n l a región. Se h a demostrado que desciende, de forma notable, la actividad del fitoplancton, que es la base de la cadena alimenticia de la que dependen el pescado, los moluscos y los crustáceos. El autor concluye afirmando que «la historia del agujero e n el cielo y sus implicaciones para la humanidad está n mu y lejos de haber pasado». Un a seri e d e razonamiento s y d e declaraciones de los principales científico s implicado s e n esta problemática, como Joe Earman , que descubrió el agujero , o Sherry Rowland. nos lleva n a la conclusión de que el daño «que y...

La Tierra desde el Espacio

Fue el 4 de octubre de 1957 cuando la Unión Soviética puso en órbita el primer satélite artificial de la Tierra. Daba una vuelta a nuestro planeta cada hora y media. Pesaba mis de 80 kilos. De este modo, se abría la zas, deleites y en el saber y la salud. El, en cambio, admiraba a la gente «sin pliegues en las capas ni dobleces en el alma»: hombres buenos, llanos, sin artificios ni embelecos, sencillos en el vestido y el ánimo. Unos pocos años antes el británico Francis Bacon había afirmado que «nuestro tiempo es el anciano del mundo, y se encuentra rico en observación y experiencia» y por tanto es, en potencia, superior. era del espacio, Y el «New York Times» pudo escribir: «Los rusos exultaban de júbilo. Cansados de las privaciones y sacrificios de la era de la postguerra, veían en "su" luna un símbolo de realización nacional y el fin de su inferioridad histórica en la tecnología y la ciencia. Para Occidente, fue como un jarro de agua fría. Occidente había subestimado ta tecnología soviética», Desde entonces, ha llovido mucho. Y han surgido multitud de clases de satélites: los satélites espía, los meteorológicos, los de recursos terrestres, los de comunicación y los de observación astronómica. Este libro, que comentamos, nos enseña y describe cómo son usados los satélites para explorar la Tierra. Su autor, Jon Erickson, ha trabajado, como especialista en exploraciones e investigaciones de importantes compañías mineras y petrolíferas. Actualmente, es un geofísico de reconocido prestigio, Se ha escrito que los únicos conocimientos inútiles son los que no se tienen. La investigación espacial, por sus elevados costos, ha producido siempre, en multitud de ambientes, un rechazo. Pero nada más alejado de la realidad. Los satélites nos ayudan en la predicción del tiempo, en la observación de los océanos, en la planificación del uso de! suelo, en la confección de mapas geológicos, en la agricultura y en la descripción gráfica de potenciales desastres naturales. Precisamente, el autor dedica el último capítulo del libro a estudiar el modo, según el cual los satélites pueden ayudar a prevenir terremotos, erupciones de volcanes, grandes tormentas e inundaciones. También los satélites pueden ayudar a predecir las épocas de hambre. Investigación científica El tema siempre de moda de la contaminación pueden ser estudiado con la ayuda de los satélites artificiales. Cada día, es mayor la sensibilidad del hombre medio hacia estos problemas. Por medio de imágenes de satélite, se puede detectar la contaminación en las áreas de grandes núcleos de población o en zonas muy industrializadas. Los constituyentes de la atmósfera, como el vapor de agua, el ozono y el monóxido de carbono, han podido ser medidos desde el espacio. Finalmente, los satélites constituyen un factor decisivo en la guerra moderna, Gracias a los satélites espía es posible la escucha de las comunicaciones por radio. Así, son hoy un potente medio de comprobación de los acuerdos de control de armamentos y de las actividades clandestinas de otras naciones. También pueden avisarnos, con tiempo, de...

La ciencia y el poder

Desde el Renacimiento y, sobre todo, desde la primera revolución industrial, la ciencia ha ido adquiriendo una progresiva importancia en los campos económico, político y militar. O sea, la ciencia ha abandonado la contemplación de la naturaleza y se ha convertido en un factor de transformación de esa misma naturaleza, Las revoluciones científicas modifican más nuestra vida que las grandes revoluciones políticas, que son. en multitud de ocasiones, unas simples algaradas callejeras comparadas con aquéllas. Bacon es el profeta de nuestíos tiempos. «Es aconsejable observar —escribe— la fuerza, efecto y consecuencias de los descubrimientos. En ninguna parte se ven aquéllos más fácilmente que en estos tres descubrimientos que los antiguos desconocieron, y cuyo origen, aunque reciente, es oscuro: la imprenta, la pólvora y el imán. Porque estos tres han hecho cambiar por completo la faz del mundo y el estado de cosas existentes; el primero en el campo de la literatura, el segundo en el de la guerra y el tercero en el de la navegación». La historia de Klaus Fuchs constituye una prueba de estas relaciones entre la ciencia y el poder. Un informe del Congreso de Estados Unidos afirmaba que «no es exagerado decir que Fuchs por sí solo ha influido en la seguridad de más personas e inferido más daños que ningún otro espía en la historia de las naciones». Nació el 29 de diciembre de 1911 en la aldea de Rüsselsheim, cerca de Frankfurt, donde su padre era pastor luterano. La sociedad alemana que le vio nacer desaparecería antes de que llegase a la edad adulta. Terminado el reinado del Kaiser Guillermo II como consecuencia de la I Guerra Mundial, Alemania entraría, con un régimen republicano, en una de las etapas más convulsas de su historia, que finalizaría con la llegada de Hitlcr al poder. Es la época de Bertolt Brecht y de Cabaret. Pero el joven Fuchs vivía en un hogar cristiano, con rígidas normas morales y con una clara orientación izquierdista, fruto de las convicciones sociales de su padre. que le llevaron a afiliarse al Partido Socialista Alemán. Terminada la enseñanza media, Fuchs estudió física y matemáticas en la Universidad de Leipzig. En 1933 llegó a Inglaterra, siendo uno de los primeros de una oleada de refugiados del nazismo. que desembocarían en las costas británicas. Fuchs había tenido dificultades en su patria por ser miembro del Partido Comunista. Se interesó especialmente por la física teórica. Trabajó en las Universidades de Bristol y de Edimburgo. Colaboró en los primeros estudios nucleares, realizados en Inglaterra y Estados Unidos, que conducirían a la fabricación de la primera bomba atómica. Fue en aquellos años, durante y después de la II Guerra Mundial, en los que el físico alemán pasó información secreta a los rusos, hasta que fue descubierto en 1950, Después permaneció varios años en la cárcel y posteriormente se trasladó a la Republica Democrática Alemana, donde murió en 1988. No resulta fácil poder valorar qué cantidad de información y qué clase de la misma fue la que Fuchs...

Ensayos sobre nuestro futuro

El autor, Max F. Perutz, nacido en Viena, doctorado en Cambridge, ha dedicado su vida a la investigación científica en los campos de la biología molecular y de la medicina, Pero también ha reflexionado en una serie de campos, que no son susceptibles de una comprobación experimental en el laboratorio. Y, fruto de esas reflexiones, ha surgido este libro. Se trata de una serie de ensayos, agrupados en cuatro grandes epígrafes: «¿Es necesaria la ciencia?», que da título al libro; «La ciencia en la guerra», «Grandes científicos» y «Sobre la ciencia». En «Grandes científicos» se hacen unos retratos humanos de cuatro importantes científicos: Fleming, Rutherford, Planck y Weizmann. Particularmente sugerente es el ensayo «La Influencia humanizadora de la ciencia». Se trata de explorar hasta qué punto nuestra sociedad podría prescindir de los conocimientos científicos. Evidentemente, éstos conllevan una contrapartida, que puede resultar, en ocasiones, espantosamente cara. Pero la respuesta es clara y tajante. Sin la ciencia, nuestra sociedad no podría mantener un nivel de vida aceptable. Y el autor cita el caso de la Revolución Cultural en China. «Los científicos eran enganchados al arado; los institutos de investigación eran cerrados o se paralizaba su trabajo por interminables discusiones sobre sus objetivos políticos». El resultado no fue, en modo alguno, la vuelta, como predicó Rousseau, a una sociedad primitiva pero feliz. Este roussonianismo de café o de pub, al que tan aficionados son ahora muchos ecologistas, se mostró imposible y llevó al país al borde del colapso económico, «porque los problemas que plantea tener a la gente alimentada, vestida y con una salud razonable, y de proteger a) país de una invasión extranjera, no pueden resolverse sin la ciencia». Evidentemente, nos encontramos muy lejos de aquellos ingenuos progresistas del siglo XIX, que pensaban que la ciencia era capaz de traer la felicidad a la humanidad. Esta postura carece por completo de sentido. La felicidad constituye un problema personal. Jamás puede ser consecuencia de una teoría científica. La ciencia solamente puede aportar un nivel de vida razonablemente confortable. Y esto no es poco. Es cierto que la ciencia encierra también muchos peligros y no pocas tragedias. Como ejemplo, basta citar Chernobil. Posiblemente, uno de los temas cruciales de nuestro tiempo sea el de saber hacer un uso ético y razonable de los conocimientos científicos. Muy interesantes son los párrafos que el autor dedica a la creatividad. Nos encontramos aquí ante un fenómeno tan difícil que nadie es capaz de describir con alguna precisión. En esta línea Popper ha escrito «que no existe, en absoluto, un método lógico de tener nuevas ideas, ni una reconstrucción lógica de este proceso. Puede expresarse mi parecer diciendo que todo descubrimiento contiene "un elemento irracional" o "una intuición creadora" en el sentido de Bergson». Pero el trabajo parece estar siempre presente en el acto de la creación y, además, la imaginación, que ocupa el primer lugar tanto en la creación artística como en la científica. En el ensayo «ciencia y política». Perutz se pregunta sobre si la ciencia puede...

Diversos temas fronterizos

Este pequeño libro —pequeño por su extensión, 141 páginas— no tiene desperdicio, Se puede leer de un golpe, en una tarde de vacaciones. Y todavía sobra tiempo. Pero puede dejarnos una huella y una preocupación que no se desvanecerán, tal vez, en mucho tiempo. Este autor aborda una serie de problemas fronterizos en los que están implicadas la religión, la filosofía y la ciencia. Porque, pese a los positivistas, el siglo XX ha demostrado que la ciencia tiene implicaciones filosóficas y, en última instancia, religiosas. En el prólogo se puede leer que «buena parte de la filosofía actual volvió las espaldas a cuestiones últimas como Dios, el sentido de la vida, del hombre, de la muerte, del mundo; cuestiones que habitualmente se designaban como «metafísicas». Pero mientras la filosofía las abandonaba, reaparecían, curiosamente, en la preocupación acuciante de los más grandes hombres de ciencia de nuestro tiempo. El demonio que se exorcizaba en una casa encontraba refugio en la otra. Es deseable que en esta apertura a la ciencia, la filosofía recupere su identidad hoy perdida, ésa que constituyó su grandeza desde Heráclito hasta Hegel». Había surgido, así, la filosofía del pensamiento débil, del pensamiento light, que no era nada más que un pensamiento deleznable. Entre las muchas cosas que nos pueden sorprender en este libro, es que se habla, después de muchos años, de Bergson. Se habla del posible rescate del autor de La evolución creadora. No en vano, en Pensamiento y movimiento. Bergson afirmaba: «Nos gustaría estructurar una filosofía que se sometiera al control de la ciencia y que pudiera incluso hacerla avanzar,,. Hay que esforzarse por constituir una metafísica que tenga fronteras comunes con 5a ciencia y que pueda entonces, acerca de una infinidad de cuestiones, prestarse a una verificación». Cuando el filósofo francés habla de que «la realidad se nos presenta como un brote ininterrumpido de novedad», o que la realidad consiste en «un crecimiento perpetuo, una creación que se prosigue sin fin», o que «el Universo no está hecho, sino que se hace sin cesar», o tantas otras citas más que podríamos aportar, se aproxima al pensamiento profundo de los físicos de hoy. Otor de los aspectos más sugestivos del libro es su interpretación del principio de CarnotClausius en el cual generaciones de científicos se han formado. Básicamente, la formulación más general del citado principio afirmaba que. esencialmente, las estructuras físicas, biológicas e intelectuales tienden, de forma espontánea, a degradarse y a descomponerse si no reciben información. Pero las investigaciones de Prigogine y Stengers, en los últimos veinte años, han aportado una nueva visión del Segundo Principio de la Termodinámica. Y, en esta línea, han llegado a la conclusión de que si bien es cieno dque «todo proceso de termodifusión debe pagar un precio entrópico, también lo es el hecho de que el "desorden" provocado permite crear un "orden", es decir, una diferencia entre distintos niveles de temperatura, Y esta diferencia se convierte en una "actividad permanente"». Se pasa revista al pensamiento de Hawking. que, en el fondo,...

En ruta por las autopistas de la informacion

La red de televisión está empezando a ser considerada una pieza de museo. El futuro es el cable: las autopistas de la información transformarán de modo radical nuestra sociedad. Hasta hace no muchos años aparecían como sectores distintos y absolutamente diferenciados la televisión, la informática y las telecomunicaciones. Además, nuestras tecnologías eran analógicas. Pero hoy ha irrumpido una nueva técnica en la que se fusionan televisión, telecomunicaciones e informática y en la que va a predominar, con carácter prácticamente exclusivo, lo digital. Este giro, este nuevo punto de vista, es lo que ha dado lugar a esa feliz expresión autopistas de la información, debida al actual vicepresidente de los Estados Unidos, Al Gore. Pero no se trata, y esto es lo verdaderamente importante, de una tecnología más, surgida como consecuencia del desarrollo científico, sino que se trata de algo que va a cambiar, de forma radical, nuestra organización social, desde las diversiones al trabajo, pasando por la sanidad y la enseñanza. Las autopistas de la información son comunicaciones en banda ancha. Actualmente, la mayoría de las comunicaciones están basadas en impulsos eléctricos enviados a través de cables de cobre. Por el contrario, la banda ancha actúa enviando impulsos de luz a través de filamentos de cristal o de fibras ópticas. La luz permite la transmisión de mucha más información que la corriente eléctrica y permite, además, una gama mucho mayor de frecuencias. De aquí proviene el término banda ancha. Pero, junto con estas innovaciones, se ha producido, en los últimos años, una nueva tecnología, que consiste en comprimir la información, lo que abre una nueva serie de posibilidades que apenas podemos vislumbrar. El futuro reside en el cable, de fibra óptica, y en el satélite. La red de televisión está empezando a ser considerada como un objeto arcaico. Y, ahora, vamos a exponer algunas posibilidades, de las muchas que van a tener las autopistas. Uno de los primeros servicios puede ser el de las cadenas de televisión por cable, con la misma calidad de imagen que ofrece el cine y con la posibilidad de elegir el idioma de doblaje de la banda sonora. Además, la televisión se convertirá en un medio interactivo. Otra aplicación puede residir en el teletrabajo. En muchos casos, no será necesario desplazarse a la oficina. Disponiendo de una terminal adecuada se podrán enviar gráficos, datos, textos o imágenes, por medio de la línea telefónica. Y se podrán igualmente recibir. Y todo ello tanto en el ámbito nacional, como continental y mundial. En cuanto a la sanidad, un médico podrá asesorar a un paciente, una vez recibidos una serie de datos a través del satélite o de la fibra. Y lo mismo en el campo de la enseñanza. ¿Y los puestos de trabajo? Desde la primera revolución industrial este tema está sometido a debate. Recordamos ahora a los ingenuos ludites, aquellos obreros que destrozaban los telares, porque pensaban que les quitaban puestos de trabajo. A éstos se les podría recordar que, cuando llegaron los primeros ingleses a Norteamérica, aquella enorme extensión de...

El futuro de la izquierda

Los recientes acontecimientos que han sucedido y están sucediendo en la Unión Soviética y en los países del Este representan un cambio total en las estructuras políticas y económicas vigentes desde el fin de la II Guerra Mundial. Pero, además de estos cambios, han significado para la izquierda, no sólo europea, sino mundial, un auténtico revulsivo. Más todavía, la izquierda se ha quedado, de la noche a la mañana, vacía y desmantelada. Su última referencia era, con todas las excepciones y salvedades que se pudieran hacer, la Unión Soviética. Era el país en que había triunfado la Revolución. Y constituía el ejemplo a imitar. El marxismo era, para unos, la verdad, más o menos absoluta. Para otros, era el método, el más adecuado, el más apropiado, el único que podía calificarse como científico, de analizar la realidad. Pero ahora resulta que, de buenas a primeras, todo este esquema, tan trabajosamente conseguido, que había costado sangre, sudor y lágrimas a millones de seres humanos, se ha venido abajo lo mismo que un castillo de naipes. El problema intelectual, que ahora se presenta, es el de reconstruir la ideología de la izquierda. Es bien cierto que, desde Bad Godesberg, todo cambió mucho. De todos modos, los socialismos y todos los progresismos, en sus diversas y hasta contradictorias formas, acaban siempre mirándose en el espejo de la Unión Soviética. El marxismo, más que una teoría, más que una filosofía, más, incluso, que una cosmovisión de la Historia, se había convertido en una religión. Y, en consecuencia, tenía sus defensores y sus detractores, y hasta sus cismas y sus herejías. Es cierto también que las ideologías han perdido fuerza en los últimos tiempos y que cada día es más difícil distinguir un programa de la derecha o de la izquierda. Aunque, forzoso es reconocerlo, las palabras derecha e izquierda tienen unas innegables connotaciones, claras y patentes en cualquier circunstancia. Además, por simple instinto de supervivencia, los partidos socialistas y progresistas tenderán a elaborar unos programas que los diferencien de los partidos conservadores. Tres corrientes A mi juicio, se pueden producir tres corrientes claramente diferenciadas dentro del panorama mundial. En primer lugar, un socialismo, izquierdismo o progresismo de los países del Este, hasta hace muy poco tiempo bajo la bota de Moscú. No parece fácil, de la noche a la mañana, establecer una economía de mercado en donde han transcurrido largas décadas de economía totalmente planificada. Es muy probable que determinados sectores políticos postulen una economía semiplanificada, con una buena dosis de dirigismo estatal. Podría ser una especie de nacionalsocialismo, con una fuerte componente nacional que los diferenciase de forma clara, según fueran las distintas nacionalidades. Hartos del proceso homogeneizador impuesto por el Kremlin, tenderán a fórmulas que realcen sus peculiaridades nacionales. En algún sentido, esta izquierda podría recordar los fascismos, anteriores a la II Guerra Mundial, al menos los más tolerantes y moderados. Otra modalidad de la izquierda, de color netamente hispánico y cuyo epicentro habría que situarlo en la América de «ínclitas razas, ubérrima sangre de...

La Química en primer lugar. Año internacional de la Química

«Chemistry: our live, our future» («Química: nuestra vida, nuestro futuro»). Recordamos a dos químicos Antoine Lavoisier, considerado el padre de la química y Dmitri Mendeléyev, autor del sistema períodico de elementos.

ITER: El proyecto mas ambicioso de la historia

El mundo busca nuevas formas de energía. Las energías tradicionales basadas en el petróleo y en el gas se extinguirán antes o después. La energía nuclear por fisión tiene muchos enemigos. Las energías renovables no cubren las necesidades energéticas cada vez mayores de la población mundial. La solución está en la energía nuclear por fusión. Así ha surgido el proyecto ITER (International Termonuclear Experimental Reactor). Los socios de este proyecto son la Unión Europea, Rusia, Estados Unidos, Corea del Sur, China, India y Japón.

La paciencia como terapia africana

Esta obra de Carlos Robles Piquer analiza la economía, la salud y la educación, las relaciones internacionales, los intentos de una posible integración supranacional, los derechos humanos, las constituciones de independencia y los ensayos para construir y estabilizar sistemas políticos democráticos así como las relaciones entre Europa y África.
Nueva Revista

Ante una nueva visión del mundo

La idea de muchos universos que, en un principio, no gozó de la simpatía de los físicos, hoy no puede ser descartada. Se trata de admitir un número infinito de universos igualmente válidos.

Un camino de ida y vuelta

Las famosas palabras de Horacio en Epistulae 2, 1, 156: Graecia capta ferum uictorem cepit dan nombre al proyecto de investigación (Graecia capta) que enmarca este trabajo dedicado al estudio de la huella literaria latina en Grecia.
Galileo. © Shutterstock

Conocer a Galileo

A lo largo de cinco capítulos y de un apéndice, Antonio Mingote y José Manuel Sánchez Ron presentan un panorama de la ciencia en este momento histórico y pretenden aproximarla al gran público, con un libro divertido e inteligentemente escrito.

EPÍSTOLAS

Juan de Verzosa (1522 / 23 - 1574) es un informador y diplomático al servicio de la corte española y por lo tanto buen conocedor de los movimientos políticos, militares o eclesiásticos en sus veinticinco años de estancia romana durante los que se producen acontecimientos tan significativos como el Concilio de Trento o la batalla de Lepanto.
Nueva Revista

El camino a la realidad

Nos encontramos ante un libro fundamental, que resume la física actual y que expone los problemas no resueltos y la evolución probable de esta ciencia en el futuro.

La correspondencia de Tomás Moro. Análisis y comentario crítico-histórico

Tomás Moro, conocido humanista, político y abogado de finales del siglo XV y principios del XVI, ha despertado de nuevo el interés de los investigadores, especialmente tras su nombramiento como patrón de gobernantes y políticos el 31 de octubre de 2000 por Juan Pablo II, propuesto por el ex presidente de la República Italiana, Francesco Cossiga.

Sólo el asombro conoce

La ciencia se encuentra hoy en el centro de las preocupaciones del hombre de nuestros días. Tomando una postura u otra frente a la misma, la ciencia presenta hoy una conciencia clara de su importancia. Práctica, dando lugar a una técnica y teórica intentando explicar el mundo. Por otro lado, la ciencia aparece hoy bajo el signo de la modestia.

James Clerk Maxwell: su tiempo y el nuestro

Maxwell es uno de los grandes de la Física, comparable a Newton, a Einstein o a Planck. Como hizo Newton con la Mecánica, Maxwell elabora toda una teoría de la electricidad y del magnetismo y de las relaciones entre ambos recogiendo lo que habían elaborado una serie de predecesores como Galileo, Kepler o Copérnico,

Cartas a una joven matemática

Este libro es una continuación de Apología de un matemático, del gran matemático inglés Godfrey Harold Hardy, de la Universidad de Cambridge. Actualiza las reflexiones de Hardy. Se abordan problemas que van desde la filosofía hasta la vida cotidiana.

Fundamentos para una teoría general de conjuntos. Escritos y correspondencia selecta

La polémica sobre el infinito nos lleva a los orígenes de la filosofía, con las paradojas de Zenón y las consideraciones de Aristóteles sobre el infinito actual y el potencial. El matemático Georg Cantor propone un esquema tripartito: finito, transfinito, absolutamente infinito.