Quede claro: no estamos en un escenario ni siquiera parecido al que teníamos hace cinco meses cuando reflexionamos sobre estas cuestiones en este mismo seminario. Las cosas han cambiado sobremanera. ¿Por qué? Porque no hay solidez en los bloques. Las fuerzas políticas en activo se pueden encontrar y posiblemente se encuentren con que volvamos a posiciones de difícil salida «normales».
Hace cinco veces yo puse sobre la mesa la terrible expresión ‘guerra civil’. Sigo pensando que ese no es nuestro inevitable futuro. España tiene una buena situación económica, según todo tipo de análisis comparativos. Ese no es el problema. El problema es un problema estrictamente político; con extraordinaria virulencia es hoy el tema de Cataluña. Y o nos dedicamos a ello a fondo o vamos a tener ya sí un problema que no solo será un tema político, sino que tendrá consecuencias derivadas en lo económico.
Yo me puse pesado hace cinco meses cuando decía que no había ningún riesgo… Hoy yo no estaría tan dispuesto a hacer aseveraciones tan seguras. Puede o puede que no, pero no lo sabemos. Hoy no tenemos capacidad de averiguar cómo puede terminar lo que hemos vivido, ¡es que lo hemos vivido!, estos días.
Según las tendencias, hace cinco meses el PSOE iba a mantenerse con mayor o menor tranquilidad en el poder, que llevaba ya disfrutando un tiempo. Ahora no se puede decir ni eso. Lo más probable es que sea el PSOE el que obtenga mejor resultado que otra fuerza. Pero no vamos a poder estar tranquilos hasta que no veamos los resultados electorales. ¿Por qué? Todos ustedes han oído hablar de la espiral del silencio y lo que representa. Posiblemente eso domine.
Si se consolida la fractura en dos, como la que hemos vivido, nos encontraremos con que es muy difícil gobernar Cataluña. Ahora estamos instalados en el enfrentamiento civil en Cataluña.
He estado, y mucho, en los temas relacionados con Cataluña, y con los actores políticos de entonces, pero claro, con todos mis respetos, pueden no ser Disraeli, pero comparado con Torra…
Es que nos puede tocar la lotería sin buscarlo. Y ojo: la responsabilidad será fundamentalmente de los catalanes. Lo siento mucho, pero esta vez no voy a quitarle carga: la situación es explosiva. Se nos puede ir un trozo de España, y no me gustaría verlo.
[Lo anterior es la transcripción de partes de la intervención de Pedro Arriola, editada por Nueva Revista. La conferencia completa se puede seguir en el vídeo de arriba.]
Véase también:
Fernando Vallespín: “Yo no me creo todavía las encuestas”
Fernando Vallespín: “A pesar de todo estamos eligiendo la moderación”
Pedro Arriola: “Solamente hay ‘el problema’. El de los territorios”
Cristóbal Torres: “Los debates influyen en un 5 por ciento de los votantes y las encuestas en un 6”