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Ofrecemos a continuación una entrevista a Francisco Javier González Errázuriz después de intervenir con una ponencia en la mesa redonda Vigencia del pasado, del I Congreso Internacional Hispanoamericano.

[Transcritas, y ligeramente editadas, las respuestas de Francisco Javier González Errázuriz son las siguientes]:

Cuando se habla de la vigencia del pasado en América no es fácil, porque para quien vive en Hispanoamérica, el pasado está tan presente, en lengua, costumbres. creencias, orden. A mí me dicen vigencia del pasado, pero si yo lo veo, está ahí, casi presente. Indudablemente se pueden decir cuáles son las manifestaciones de ese pasado que uno más puede resaltar. Por un lado, una herencia que es tradicional, y que es compartida por todo el mundo hispano, y que tiene que ver con un mestizaje, pero un mestizaje que no debe entenderse simplemente como lamentablemente lo es. No fue un asunto meramente racial, sino que fue un mestizaje, sobre todo cultural, de costumbres, de leyes, de creencias, de lenguas.

Está fundamentado, en el tema religioso; en el tema de la lengua y de un orden político que se traspasa desde la monarquía hispana y la institucionalidad que se da en la América española hacia el periodo republicano. Soy un convencido de que, aunque muchos digan que las independencias fueron una ruptura, no lo fueron en la práctica; fueron una separación que no es lo mismo.


Lo que nace de Hispanoamérica es algo absolutamente nuevo. No es Europa, no es el mundo indígena, es algo nuevo que tiene esta característica de mestizaje étnico, pero sobre todo cultural (F.J. González Errázuriz)


Otro aspecto que me parece muy interesante destacar -que yo citaba en la ponencia, señalando el pensamiento del filósofo francés Gustave Thibon-, es que se piensa el mestizaje como unión, y la palabra unión no es exacta, porque unión de alguna manera implica la posibilidad de división. Thibon habla de unidad y en este caso el mestizaje nos puede llevar a algo que es mucho más fuerte que una mera unión de elementos. Es una fusión, es algo nuevo. Como decía un filósofo venezolano y ensayista, Arturo Uslar Pietri, lo que nace de Hispanoamérica es algo absolutamente nuevo. No es Europa, no es el mundo indígena, es algo nuevo que tiene esta característica de mestizaje étnico, pero sobre todo cultural.


Es muy difícil rechazar un pasado cuando te estás rechazando a ti mismo. Entonces se produce una tensión que ha estado siempre presente en Hispanoamérica entre una realidad mestiza, étnica y cultural, frente a esta otra realidad de lo que no se quiere haber sido (F.J. González Errázuriz)


Y a la par de eso hay que hacer otra distinción, que también uno puede ver una vigencia del pasado, no precisamente la herencia, sino la crítica. Los procesos de independencia se producen en prácticamente todos los países de Hispanoamérica, con una corriente muy crítica del pasado español. Es falsa pero, en parte, la puedo entender porque se trata de crear la idea de un Estado nación. Estamos creando algo nuevo y se rechaza un pasado. Pero es muy difícil rechazar un pasado cuando te estás rechazando a ti mismo. Tú eres lo que eres. Entonces ahí se produce una tensión que ha estado siempre presente en Hispanoamérica entre una realidad mestiza, étnica y cultural, frente a esta otra realidad de lo que no se quiere haber sido. Pero somos esta crítica frente a lo español y se habla de la leyenda negra y el dominio español en América, que son cosas estereotipadas y falsas. Y es lo que explica ciertos movimientos anti hispanistas que muestran una postura de rechazo al pasado. Pero vuelvo a insistir, como en la familia tú eres hijo de un padre. Tú lo puedes rechazar, pero jamás va a dejar de ser tu padre. En América pasa lo mismo. España nos dio algo y ese rechazo no tiene mucho sentido y es parte de esta búsqueda de nuevos modelo de respuesta. Por eso, América transita en esta tensión entre lo que es y lo que algunos quisieron que fuera.

Respecto a la responsabilidad de España en la pobreza de Latinoamérica, no creo que la riqueza o pobreza de las naciones se mida simplemente por un tema económico, hay muchas otras cosas importantes. Desde el punto de vista de los recursos, no se puede decir que América Latina sea pobre. Desde el punto de vista intelectual tampoco. España ahora está dentro de las grandes potencias, es un país desarrollado y lo ha hecho muy bien. América quizás no ha llegado a ese nivel, podría llegar. Y ahí viene de nuevo  los efectos de esta tensión entre lo que América Latina es y lo que se querría hacer.


¿Los problemas de América se deben a España o a nuestro propio problema republicano? Yo creo que se deben a nuestro propio problema republicano, precisamente porque quisimos cortar con un pasado que nos daba una identidad (F.J. González Errázuriz)


Si uno analiza la presencia del Estado español en América durante el Siglo XVII y sobre todo el XVII, uno ve una América muy desarrollada a nivel cultural, educativo, no vamos a decir industrial, pero sí agrícola.  Uno ve después la América del siglo XIX, la América republicana, y ve una América sin un orden, con bastantes crisis, con la idea de que las constituciones son las que hacen la realidad, lo cual es falso. ¿Los problemas de América se deben a España o a nuestro propio problema republicano? Yo creo que se deben a nuestro propio problema republicano, precisamente porque quisimos cortar con un pasado que nos daba una identidad, una realidad, y se buscaron nuevos modelos. En el siglo XIX fueron modelos liberales, después modelos anglo-franceses, después incluso hubo cierto acercamiento con el modelo alemán, en el caso de. Chile. Y en el siglo XX tenemos el mismo problema: América que no se acepta a sí misma, y estamos continuamente mirando hacia afuera y buscando ideas que no calzan con la realidad de las naciones, su condición mestiza, su condición cultural, su propia idiosincrasia. Entonces la culpa de la pobreza no la tienen otros, la tiene el América al no aceptarse como es. Es ciencia-ficción o historia contrafactual, pero si no hubiera existido el fenómeno de la independencia me parece que el grado de desarrollo en América habría sido óptimo también. No niego que pueda llegar ahora a un desarrollo, pero a veces buscamos modelos que no son los que coinciden con la realidad.


Soy el primero en aceptar que, efectivamente hubo errores en la Conquista, como lo ha habido en toda la historia de la humanidad (F.J. González Errázuriz)


Todo el mundo sabe que hubo abusos en la Conquista de América. La conquista fue hecha por seres humanos. Lo que no se puede hacer es darle un carácter institucional a problemas que tuvieron un rango particular, es decir personas que cometieron errores. Soy el primero en aceptar que, efectivamente hubo errores en la Conquista, como lo ha habido en toda la historia de la humanidad. Si tú me preguntas ¿hay algo que aceptar positivamente? Sí, hubo cosas buenas y también hubo cosas malas, hubo quienes actuaron bien y quienes actuaron mal. Lo que no acepto es darle el rango institucional a unos supuestos errores, porque en el fondo es culpar. Ante los problemas del presente, ¿hay que buscar el culpable en el pasado? No estoy de acuerdo con esta Historia revisionista que, por lo demás, no se asienta en las fuentes, Si uno va  a las fuentes termina necesariamente hablando de una historia objetiva que muy distinta de la que quieren contar algunos con esta característica más bien revisionista y con mucho efecto político. Lo peor que hay, a veces, es un político hablando de historia… es algo bastante negativo o que puede terminar muy negativo.

Hispanoamérica es una identidad, una unidad, una realidad presente en la actualidad. Aunque muchas veces me cuestiono si es Hispanoamérica o Iberoamérica: la América hispana que habla español son 420 millones más o menos, pero tenemos un gran continente que es Brasil, una realidad lusitana. Por eso yo hablaría también de Iberoamérica, porque los portugueses tienen mucho que ver con la realidad americana y con la realidad de Península. Muchas veces Hispanoamérica se asocia al concepto historia, como algo pasado, pero Hispanoamérica es una realidad viva que tenemos que volver a potenciar. Tenemos que volver a unir, y cuando digo unir no significa no reconocer las diversidades. Somos distintos, como en Europa. Me topé con una persona en París y me dijo ¿usted vive en Chile?, y me dijo “yo tengo una hermana en Bogotá”. De acuerdo, pero usted comprenderá que son cosas distintas. A veces geográficamente se hace una amalgama, pero tenemos diversidad, y tenemos una unidad increíble.


España (la madre patria es una realidad) está llamada a liderar esta nueva convocatoria de resaltar lo hispanoamericano, o iberoamericano si se quiere, en términos más amplios (F.J. González Errázuriz)


España (la madre patria es una realidad) está llamada a liderar esta nueva convocatoria de resaltar lo hispanoamericano, o iberoamericano si se quiere, en términos más amplios. Somos en términos lingüísticos uno de los sectores más importantes, el cuarto o quinto en el mundo; en términos económicos de una potencia, lo que puede ser Europa a través de España y América algo muy importante. Hay mucho de lo hispanoamericano que puede aportar y no es que esté en contra el mundo anglosajón, pero creo que hemos estado demasiado tiempo callados, y podemos decir muchas cosas y aportar mucho en términos de realidad global actual.


Gabriela Mistral hace un recorrido geográfico por Chile a través de la poesía Y su poema Desolación francamente es algo que marca mucho (Francisco Javier González Errázuriz)


Para conocer la realidad chilena a través de grandes lecturas, recomendaría a Gabriela Mistral, la obra completa. Ella hace un recorrido geográfico por Chile a través de la poesía, y es un premio Nobel y realmente notable. Y su poema Desolación francamente es algo que marca mucho. Como soy historiador, sería bueno que leyeran una historia contemporánea de Chile, para entendernos, porque no es fácil. Recomendaría La historia de Chile republicano del siglo XX de un historiador que se llama Gonzalo Vial. Y en términos literarios, la obra completa de Vicente Huidobro, un europeo chileno, que se rio de Chile, se rio de Europa. A mí me llama mucho la atención su obra en general.


Francisco Javier González Errázuriz es doctor en Historia por la Universidad de París I – Panthéon-Sorbonne. Actualmente ejerce la docencia como profesor titular de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de los Andes (Chile). Es, además, profesor de la cátedra de Historia de Chile contemporáneo y del Doctorado en Historia, donde imparte cursos de su especialidad y ha dirigido diversas tesis doctorales.

Sus investigaciones se centran fundamentalmente en la influencia europea en Chile e Iberoamérica durante el siglo XIX. Además de diversos artículos en revistas especializadas, recientemente ha publicado (en conjunto con el profesor Jon Martínez) el libro Familias empresarias y desarrollo económico en la Historia de Chile. Actualmente está trabajando en la elaboración de varios capítulos de la Historia de la República de Chile publicada y editada por la Academia Chilena de la Historia.