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La verdadera cuestión no es tanto si la Biblioteca de Occidente sobrevivirá en forma impresa o en forma digital», sino más bien que «la literatura occidental ya no tiene un canon», o, si se quiere, «ya no es el canon de la literatura de Occidente». Eso ha sostenido esta mañana en Cilengua, el Centro Internacional de Investigación de la Lengua Española (San Millán de la Cogolla), el profesor Michel Zink, erudito del Colegio de Francia.

El catedrático Miguel Ángel Garrido Gallardo ha discrepado abiertamente de esa conclusión. Para Garrido Gallardo, director del Congreso de la Biblioteca de Occidente, presidente del Comité Científico de la UNIR, la Universidad Internacional de La Rioja, e investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, la Biblioteca de Occidente se consolidará porque “la Biblioteca de Occidente sobre la que se está debatiendo en este congreso no se asocia a ninguno de los modelos que ha desarrollado el profesor Zink”.

Los modelos citados por Zink fueron la colección de La Pléiade de la literatura francesa, la colección Biblioteca Clásica de la Real Academia Española y los libros clásicos gratuitos digitales, de dominio público, que ya “regalan” distribuidores como Amazon. Sin embargo, Zink ha insistido: “La cuestión es saber si se puede mantener un canon en el interior de un conjunto social que ya no es el canon universalmente admitido y reconocido”.

Zink, desde luego, ha cuestionado seriamente la suposición generalizada de que los lectores en soportes digitales son aquellos, y sobre todo serán aquellos, que consuman mayoritariamente obras “ligeras”, tipo novela rosa o novelas policíacas. Y ha puesto de manifiesto que Internet es extraordinariamente útil para consultar obras y leer obras de gran calidad editorial, con fuerte aparato crítico. Es más, para leer incunables, manuscritos y tesoros digitalizados de prácticamente todas las bibliotecas del mundo. Eso será cada vez más así.

El sabio galo, por otra parte, aportando datos estadísticos de Francia, duda mucho de que el libro impreso haya muerto, o de que a pesar de la subida clara de la lectura en soporte digital, ese progreso sea indefinido.

Ha recordado que mantener al día los soportes digitales también es una tarea económicamente onerosa, y que habrá que ver cómo queda el mundo de acceso a bibliotecas, repositorios, etc., con qué gastos, para determinar con más claridad en qué dirección iremos. Ha señalado la posibilidad de la impresión por demanda, que será también barata, como otra alternativa más del panorama del futuro. “¿Quién pagará qué y a qué precio?” es parte importante del debate sobre lo que predominará, si lectura en digital o en papel.

Gonzalo Capellán, consejero de Educación de La Rioja, ha agradecido a la UNIR,  al comienzo del acto en el Monasterio de Yuso, en San Millán de la Cogolla, la organizaciónde este Congreso, que ha “elegido el mejor marco bajo la dirección del profesor Garrido Gallardo”.

Finalmente, Jean-Pierre Étienvre, director de la Casa de Velázquez, ha elogiado a su compatriota como “un gran humanista europeo”, con un cargo equivalente en Francia al de académico de la Real Academia en España, y que conoce como pocos la literatura medieval.

Los congresistas venidos de Madrid, medio centenar, se han quedado admirados por la belleza de la tierra riojana, y en especial por este rincón que dio origen a la lengua española.


Foto: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Great_Books.jpg

Director de «Nueva Revista», doctor en Periodismo (Universidad de Navarra) y licenciado en Ciencias Físicas (Universidad Complutense de Madrid). Ha sido corresponsal de «ABC» y director de Comunicación del Ministerio de Educación y Cultura.