Mariano González

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Periodista. Licenciado en Ciencias políticas

El paso de España por Europa

Lo que el mundo debe a España es un repaso a nuestra historia, desde la irrupción de los visigodos en Hispania hasta el reinado de Juan Carlos I, para dejar un mensaje central: la contribución de España a Europa ha sido intensa, siempre bajo el prisma de la Iglesia católica.

Una alternativa a la geometría variable

En política, estamos ante un distanciamiento entre los principales actores de la vida pública, con efectos paralizantes ante posibles iniciativas para beneficio de todos los ciudadanos, al margen de su ideología o de la comunidad autónoma a la que pertenezcan
Nueva Revista

Elegía al código ético de las televisiones

Han pasado casi cinco años desde la entrada en vigor del primer Código de Autorregulación firmado en España por varias cadenas de televisión. Desde entonces, la Agrupación de Telespectadores y Radioyentes de Madrid (ATR) -pionera en la promoción de la calidad de los contenidos en medios audiovisuales y en el impulso a la participación de los usuarios en tan importante actividad- lleva realizados ocho informes sobre el grado de cumplimiento de ese código ético.La iniciativa (abril, 2004) fue aceptada por TVE1, TVE2, Telemadrid y las privadas Antena 3, Cuatro, La Sexta y Telecinco. El compromiso de amparar unos contenidos adecuados a los menores de edad (4-13 años) constituyó un avance histórico en el orden de la autorregulación de los medios. A tal fin, se propusieron vigilar la programación en la franja de 6.00 a las 22.00 horas para no ser agresivos con los consumidores más indefensos, los niños. El segundo compromiso, más contundente, consideró el tramo de17.00 a 20.00 horas de «protección reforzada», con idéntico intento de hacer compatibles ficción, entretenimiento y estímulo a la educación de niñas y niños.BENEFICIOSPersonalidades destacadas (Carmen Cafarell, Alejandro Echevarría, José Manuel Lara y Javier Díez de Polanco) estamparon su firma sobre un documento esperanzador para millones de padres, satisfechos de que contaran con ellos a la hora de decidir y controlar más la programación para menores de trece años. El Código de Autorregulación es uno de los documentos más concienzudos, bien pensado y mejor articulado, de objetivos más explícitos, concretos y generosos conocido en España.Abarca desde el uso de un lenguaje correcto y limpio, hasta filtrar los mensajes discriminatorios e intolerantes, la violencia gratuita, la incitación al sexo y al consumo de alcohol, tabaco y drogas, pasando por evitar la temática conflictiva o las secuencias crudas y brutales capaces de aturdir la psicología del niño. Preserva la intimidad de los menores en los programas informativos y les ahorra los anuncios de programas calificados para mayores, a la vez que se les ayuda, a ellos y a sus padres o tutores, mediante la correspondiente señalización de alertas en otros.Guión prolijo en su desarrollo, convertía este enjundioso código en la joya de la corona televisiva. Los padres podrían tener la seguridad de que, en ese horario de protección reforzada, cualquiera de las programaciones de estas siete cadenas sería buena compañía para sus hijos, aun cuando ellos no estuviesen a su lado.BALANCEDesgraciadamente, entre propósitos y hechos creció la distancia. Por eso, la anterior valoración puede catalogarse de elegía al mejor código ético que ha tenido hasta hoy la televisión en España. Salvo que las cadenas quieran reconsiderar su vigencia activa. Para ellas, dicho documento es un punto de referencia en la calidad de su producción, pues les espolea a apostar por el talento, sin olvidarse de lo inolvidable: la tiranía de las audiencias.La ATR de Madrid inauguró un sistema de control a los objetivos del código. Su primer Informe de Seguimiento data de junio de 2005. Recabó la colaboración de especialistas en Sociología de la Comunicación...
Nueva Revista

Nacionalismo y regionalismo, una técnica de poder

El tiempo es justiciero y pone todas las cosas en su sitio», escribió Voltaire. Aunque, a veces, no haga justicia y las ponga patas arriba, como ha sucedido con la Constitución más democrática e innovadora de nuestra historia, aprobada hace ahora treinta años, el 6 de diciembre de 1978. El cambio, provocado, es un desplazamiento del eje del poder, desde España como nación indivisible a un conjunto de comunidades, que primero fueron autonomías dentro del Estado y hoy caminan hacia la insustanciosa condición de territorios.Triste herencia de los partidos nacionalistas y regionalistas, inflados hasta el exceso por el Gobierno central, que les ha dado un plus de respetabilidad al pactar con ellos. Ambos han sacado pingües ventajas de una operación de reparto del poder, planificada por el actual presidente del Gobierno y sus ayudantes más próximos. Los grupos nacionalistas vascos, catalanes y gallegos han forcejeado todo este tiempo hasta desnaturalizar el Estado de las Autonomías; los regionalistas se han pegado al terreno, vendiendo sus resultados electorales al mejor postor.Paradójicamente, unos y otros vienen perdiendo votos desde hace tiempo. Sin embargo, ganan influencia en las decisiones de Estado, de Gobierno y en las administrativas. Han adelgazado la fortaleza del Estado español y puesto al descubierto que el nacionalismo no trata de despertar ninguna realidad colectiva preexistente, como dicen ellos, sino de alentar una voluntad política que, a su vez, fabrique una nación (A. Cruz Prados. El nacionalismo. Una ideología. Tecnos 2005).USAR Y TIRAREn definitiva, a lo largo de una generación, y sobre todo con la llegada (2004) del nuevo socialismo al poder —el de usar y tirar, representado por José Luis Rodríguez Zapatero—, el Estado autonómico y unitario se ha cuarteado en un mosaico de territorios, cuyo ideal más acariciado parece ser una confederación de pueblos (¿ibéricos?). Las cesiones del presidente, lejos de moderar a nacionalistas (entre los cuales incluyo a IU) y regionalistas, les ha procurado más brío. Y ha devenido en una nueva técnica: la de mantenerse en el poder mediante pactos entre fuerzas políticas antagónicas, pero ambiciosas de mando. Han nacido los nuevos amos de la España posconstitucional, los nuevos ricos en plena crisis de las ideologías.¿Explicación de este fenómeno? La Constitución quiso hacer descansar la bóveda del Estado autonómico sobre dos partidos de implantación nacional. Como el sistema electoral producía mayorías parlamentarias frágiles, aquellos dos partidos recurrieron a los nacionalistas, al PNV y CiU. Hasta que Pasqual Maragall, aprovechándose del «buenismo» de Rodríguez Zapatero, recién llegado a la dirección del PSOE, avanzó un paso más e impuso una estrategia rompedora en el socialismo catalán: se tiñó de nacionalista, ganó por la mano a CiU y tomó la Generalitat (2003) con los independentistas de ERC y ex comunistas de Iniciativa por Cataluña. CiU, nacionalismo más proclive al diálogo, ganadora de las autonómicas, quedó fuera de combate, mientras ERC e ICV, arrellanados en los sillones de cachemir, lucían en el club de los nuevos amos.AL PODER COMO SEATan excéntrico modo de gobernar, dirigido expresamente a conquistar el poder...

Galicia, País Vasco y Europa esperan urnas en plena recesión económica

Pocos mecanismos mejores que las urnas para averiguar el estado de ánimo de los ciudadanos. Aun siendo la actual crisis económica muy profunda, todavía no ha tocado fondo.

Elecciones vascas. Un futuro exclusivamente nacionalista

A la vista de la importancia de las últimas elecciones autonómicas en el País Vasco, Nueva Revista decidió retrasar el cierre de este número paro poder incluir el siguiente comentario de Mariano González, analizando los resultados de los comicios, el día después de las elecciones.