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Analizar en profundidad una película como El Espíritu de la colmena treinta años después de su estreno no es una tarea fácil. Durante las tres décadas transcurridas ha sido constante la aparición de estudios, análisis y trabajos de muy diversa índole y contenido sobre este largometraje.

Su efecto está plenamente justificado. El espíritu de la colmena, la obra más importante de Víctor Erice, constituye un nuevo punto de partida para el cine español; es un antes y un después. Incluso, el momento de su estreno, dos años antes del trascendental cambio que se iba a producir en España, le confiere un significado muy especial.

Sin embargo, Jorge Latorre, con su obra Tres décadas de El Espíritu de la colmena, supera brillantemente ese empeño, consiguiendo, de una parte, un análisis personal muy completo de lo que ha supuesto la película; y de otra parte una síntesis completa de cuanto se ha dicho y escrito sobre la misma.

Jorge Latorre es profesor universitario, doctor en Historia del Arte y Bachelor en Filosofía, por lo que su obra se reviste de una erudición y de un sentido didáctico que hace de este libro un instrumento insustituible para entender y sentir lo que ha supuesto para el cine español en los últimos treinta años la obra más importante de Víctor Erice.

La personalidad y trayectoria de Erice es abordada por Jorge Latorre desde sus inicios, hasta el momento actual: sus primeros cortos, en los años sesenta, en especial Los días perdidos; las colaboraciones en varios guiones y su actividad como crítico, hasta llegar, en 1 9 7 3 a El Espíritu de la Colmena. Vendrían después, El Sur y El sol del membrillo; y, finalmente, el guión de El embrujo de Shangai, que costó a su autor tres años de trabajo, pero que, desgraciadamente, quedó en mero proyecto. Hubiera completado una magnífica trilogía junto a El Espíritu de la Colmena y El Sur; los varios trabajos de diverso carácter que completan la obra de Víctor Erice, hasta los momentos actuales. Todo ello es analizado con exhaustividad y rigor por Jorge Latorre.

Toda esta trayectoria es examinada por Jorge Latorre con rigor, si bien, forzosamente, con más intensidad que extensión. La obra cinematográfica de Víctor Erice no es extensa. Pero este efecto no debe conducir a engaño: la genialidad impone, en ocasiones, límites cuantitativos a la creatividad.

Tras este encuentro con la trayectoria de Erice, Jorge Latorre desarrolla el análisis de El Espíritu de la Colmena a partir de lo que es su núcleo fundamental: en el cine de un pueblo cualquiera, en la posguerra civil española, una niña queda subyugada al contemplar en la pantalla al monstruo que creara el Doctor Frankenstein. En sus ensoñaciones, la niña cree que el monstruo, para ella entrañable, existe en realidad. Se afana, entonces, en buscarlo y, al fin, lo encuentra, como le ocurre a la pequeña heroína de la película.

A partir de ese momento y a través del embeleso de la niña, irán surgiendo las infinitas vivencias del largometraje: ante todo, el simbolismo del encuentro de la pequeña protagonista con el monstruo, que tanto obsesiona a Erice.

Asimismo, surge también el posible paralelismo del escenario en el que se desarrolla la película con la realidad política española de los primeros años cuarenta, si bien en un contexto más generoso y abierto del que sugieren críticas y posturas más extremas.

Igualmente, toda la constelación de sentimientos implícitos en la película: el descubrimiento e inicio de la vida, las ilusiones, los sueños, la nostalgia por el tiempo pasado, el miedo, la muerte…

Latorre realiza un enorme esfuerzo de aportación personal al analizar todos estos elementos, sintetizando, al mismo tiempo, lo numerosos estudios, críticas, ensayos y opiniones que ha suscitado la obra clave de Erice en los últimos treinta años.

El autor estudia en Tres décadas de El espíritu de la colmena la simbología que contiene la película; las referencia a otros medios de expresión artística; las influencias recibidas de anteriores experiencias cinematográficas y, a su vez, sus efectos sobre el cine producido con posterioridad.

Esta investigación puede calificarse de excepcional. Las citas constantes y la bibliografía utilizada por Latorre hacen de su obra el trabajo más ambicioso realizado sobre El espíritu de la colmena, que se completa con una exposición secuencia a secuencia del contenido de la película.

En suma, el libro de Latorre es importante para aprender, para disfrutar y para recordar. Para aprender cine, ya que puede considerarse como un instrumento de introducción al estudio y conocimiento de esta forma de expresión artística. Un libro para disfrutar del análisis de una obra maestra del cine español. Y es, en conclusión, un libro para recordar esa obra maestra, para que no caiga en un injusto e inmerecido olvido, en un momento, como el actual, de peligrosas evocaciones, que ya debieran estar definitivamente superadas.