Alicia García-Navarro
Eugenio d´Ors, La Vida Breve
De nuevo el verano, y con él, otro inédito de Eugenio d'Ors, escrito durante el verano de 1925 y publicado en la revista Blanco y Negro, dentro de la serie "La Vida Breve"."Calendario y Lunario. La Vida Breve", que d'Ors firmaba con el seudónimo "Un Ingenio de esta Corte", aparece por primera vez el 11 de enero de 1925 -"Incipit vita brevis..."-, y se prolonga hasta el 15 de marzo de 1931. Son más de cinco años de colaboración semanal casi ininterrumpida en el Blanco y Negro, habitualmente dentro de la sección "Gran Mundo. Crónica de la semana. Ecos varios de sociedad". Su contenido, intencionadamente frívolo, es un reflejo inteligente de la vida social y cultural de esos años. Por ella desfilan los personajes habituales del momento, y se da noticia de sus actividades, sus comentarios, pero siempre desde dentro, porque el autor es uno más de ellos y forma parte de ese juego social. Se hace referencia a temas muy diversos: las nuevas adquisiciones del Prado, los cursos y conferencias que se llevan a cabo en Madrid, las exposiciones, conciertos, la actividad teatral, la hípica o hasta la descripción detallada de los distintos tipos de tejidos populares españoles siguiendo la obra de Mildred Stapley.La vida madrileña del momento queda reflejada en las "hojas del carnet" -como a él le gustaba llamarlo- de "La Vida Breve". Pero este carnet no se limita a reflejar solo los acontecimientos de Madrid, ni de España, sino que lo acompaña en sus viajes —muy frecuentes— de los que nos quedan crónicas deliciosas.La selección que he realizado corresponde justamente a un viaje —unas vacaciones de verano durante los meses de agosto-septiembre de 1925—, que tiene un interés adicional para el conocimiento de la obra del autor; y es que estas "hojas" contienen el germen de lo que será años más tarde una de sus novelas: Sijé. Este personaje aparece por primera vez dentro de la obra de d'Ors en "La Vida Breve", y más concretamente en la crónica del 30 de agosto, donde desaparece o se le nombra por última vez el 25 de octubre —"¿qué estará haciendo nuestra Sijé a estas horas? Procuraremos no pensar más en ella. Desde luego ya no la nombraremos más"—. Son un total de ocho crónicas de las que, por razones de espacio, reproducimos únicamente las seis primeras -hasta el 11 de octubre inclusive—, que son las que constituyen el núcleo fundamental de este relato.Tres años después (entre 1928 y 1929), Eugenio d'Ors escribe una serie de 67 glosas, ya bajo el título de "Sijé", que se publican en el diario barcelonés El Día Gráfico. Posteriormente, con motivo del centenario del nacimiento del autor, Carlos d'Ors editará estas glosas en forma de libro (Editorial Planeta, Barcelona, 1981).Sijé forma parte, junto con La Bien Plantada, Gualba, Cartas a Tina, y otros apólogos, de la serie denominada "Las Oceánidas"; título que según su autor, en una nota a la primera edición castellana de su fardin Botánico, "alude a la función...
La historia del mundo en quinientas palabras
Nueva Revista reproduce un extracto del libro "La historia del mundo en quinientas palabras" escrito por Eugenio d'Ors.
Las Cronicas de la Ermita de Eugenio D´Ors
Desde los primeros años del siglo hasta su muerte en 1954, Eugenio d'Ors construyó día a día, a través de las páginas de los periódicos, el edificio del Glosario. Glosari, Nuevo Glosario y Novísimo Glosario constituyen las tres partes de este edificio.En algunos casos, estas glosas diarias constituyeron series que adquirieron una cierta autonomía y que fueron publicadas como obras independientes: La bien plantada, Gualba la de mil voces.... Otras, sobre temas diversos, fueron agrupadas cronológicamente, e, inicialmente, publicadas en volúmenes anuales.La recopilación y publicación del Glosario de forma sistemática llega hasta 1945. La mayor parte de las glosas escritas a partir de ese año y hasta la muerte del autor no han vuelto a ver la luz, y duermen escondidas en las hemerotecas; entre ellas, muchas de las pertenecientes a la serie denominada Crónicas de la Ermita.Las Crónicas de la Ermita fueron escritas por Eugenio d'Ors desde su retiro catalán en Villanueva y la Geltrú: una antigua Ermita, que da nombre a la serie, adosada a una Capilla dedicada a San Cristóbal. Este conjunto arquitectónico está sobre un cerro, frente al mar, y, cerca, el Faro. Así describe Eugenio d'Ors en la glosa titulada "La Ermita, la Capilla y el Faro", la unión de estos tres elementos: "Hay a dos pasos, en nuestro mismo cerro, erecto y luminoso, mira de meridianos, vigilancia de noches, el Faro. Nada mejor para aliar a la tarea que Ermita y Capilla hemos emprendido juntos, que ese tercero y que a todos nos guarda y en sus reflejos nos funde, la Cultura".Allí solía pasar muchas temporadas, especialmente las vacaciones de verano, Navidad y Pascua, y allí murió. Fueron diez años de reencuentro con su amada Cataluña, en los que no pudo faltar el diálogo con la cultura catalana, diálogo que propició el nacimiento, el diez de septiembre de 1946, de la "Academia del Faro de San Cristóbal-"... nueva Academia Breve, pero científica ésta"—, que, tras su muerte, permaneció activa hasta abril de 1978.Las largas temporadas pasadas en la Ermita, así como las anécdotas que a éstas acompañaron, constituyen el argumento fundamental de las Crónicas de la Ermita. Eugenio d'Ors explica de esta forma la diferencia entre su "glosar consuetudinario" y las glosas de esta serie: "Para las primeras, tomo un material de carácter, a su manera ... histórico. Se trata de extraer y destilar de cuanto acontece, la esencia ideal, transformando así, según la consabida fórmula, la anécdota en categoría. Por un juego, que solo alcanzo a practicar de tarde en tarde, cabe tomar un material eterno —estructuras, gestos y estilos humanos, que son siempre los mismos—, para, al revés que antes, convertirlos en episodio, en acontecimientos, siquiera menudos, susceptibles de crónica". Así los temas preferidos son las andanzas de Bieló -figura central de estas crónicas—, las costumbres y preocupaciones de los pescadores, las peripecias de las chicas de "Educación y Descanso", los bañistas, el Faro, y su propia vida en la Ermita.Estas glosas aparecen, de forma intermitente, en el diario Arriba entre...